Quiero verte

Quiero verte y se supone que esto es fácil de decir, pero no lo es. A veces el problema es el silencio, a veces el pudor, y a veces la distancia. A veces, con palabras soy incapaz de pedírtelo, porque tendría que responderte para qué. Quiero verte y que me devuelvas la mirada el tiempo suficiente para que decida esquivarte y dilatar las palabras sobre mis verdaderos deseos. Quiero que nuestros ojos se encuentren como deteniendo el tiempo, para aprender ese lenguaje que tarde o temprano terminaremos por construir juntos para aislarnos del mundo. Quiero verte como si te hubiese conocido en la infancia, y la vulnerabilidad nos saliera natural, como si no fuésemos un hombre y una mujer que deben temerse como se teme a lo que confunde al cuerpo y descontrola al inconsciente. Quiero verte a pesar de la muerte. A pesar de la ruptura de mi vida en dos, desde el momento en que te fuiste, sin ser consciente de que no hacer nada también es decidir. Quiero verte para reír de tus chistes ...